Y dos: que ese pensamiento no se haga transparente para ella
Juegue y experimente con diversos movimientos y desplazamientos. Va a deber preocuparse únicamente por sus propias sensaciones y no por el hombre. Provisionalmente debe suspender su preocupación habitual por el placer de él y ser egoísta para aprender a percibir y acrecentar la reacción vaginal.