Solo recuerda que lo que marques de qué forma obligatorio tal vez también debes cumplirlo. Si eres hombre y anotaste semblante precioso para ella, está claro que no siempre podrá cumplirse, mas por lo menos se puede tener un rostro amable, sonriente. Recuerda que la sonrisa es capaz de embellecer cualquier rostro.
En este estadio de la meditación el yoguin aún está perturbado por la realidad experimental, aunque comprende meridianamente que esta se encuentra impregnada por el Absoluto; en el SavikalpakaSamadhi el meditador todavía retiene la conciencia de su personalidad o bien Ahankara.
Siempre y en todo momento me atrajo esa región finita del espacio de mi hombre. Antes, procuré llegar a ella, mas el instinto macho que se abochorna de su posibilidad de percibir, me había distanciado con un suave manotazo o una exclamación de profundo desconcierto.
Sostenga una psique abierta y no asuma que conoce todos sus disparadores de placer (o bien los de su pareja). Incluso si solo tienes un tanto de curiosidad, seguramente merezca la pena probar algo cuando menos una vez para poder ver si te agrada. Podrías sorprenderte con un nuevo truco en la sala de juegos.
En la práctica, es muy afín a las técnicas empleadas en el Tantra, pero la razón no se basa en una filosofía espiritual; en cambio, explica el modo de acción y la necesidad de que los hombres y las mujeres tengan orgasmos intensos y largos con el funcionamiento de nuestro sistema inquieto.
Particularmente el fetichismo lo contemplo en la totalidad, en el conjunto de las dos s, la atracción por elementos o bien prendas que en el instante del juego se lleven, crea un entorno de alto contenido erótico.
Doto a mis encuentros con una naturalidad inigualable, todo tiene que surgir sin ningún tipo de guion, de forma tranquila y relajada.
El sexo es de la vida y siempre y en todo momento lo será sin importar un mínimo de qué manera avancemos. En consecuencia, este post podría ser enterrado en una cápsula del tiempo y desenterrado dentro de mil años y aún tendrá el mismo valor para las personas que lo lean.
Si te resulta difícil decirle que no y ver qué sucede, plantéate lo que podría pasar si se acostumbra a que le digas que sí a un comportamiento, actitud, actividad o gasto, que en general no puedes dejarte.
Sin embargo, a pesar de todos estos atributos maravillosos que encuentro en él, nuestra vida íntima no es como yo esperaba que fuera ya antes de haberme casado… pues debo aclarar que fui virgen al matrimonio.
