En una web como esta, dedicada al erotismo, no podíamos dejar de dedicar un artículo a su obra
En todas y cada una de las posturas eróticas sentadas precedentes era a la mujer a quien correspondía marcar el ritmo del coito. En el caso de la postura del deleite, va a ser el hombre quien lleve la iniciativa y la mujer la que permanezca sentada.
